ESCUELAS NADAÁ - Clases de Arabe Gym

ARABE GYM

El Arabe Gym es una fusión entre las fuerzas del Aeróbic y la sensualidad de la Danza Árabe, lo que resulta una clase divertida y dinámica. Todos pueden hacer este tipo de trabajo tanto hombres como mujeres de hasta 80 años. Cuando hablo de Aeróbic no significa que vamos a saltar como en el Aeróbic, sino que se aprovecha el trabajo continuo de la clase para cumplir con el resultado cardiovascular demás de quemar grasas y modelar. Este es un programa de aeróbic de bajo impacto, para reducir la tensión en pies y piernas, zonas muy propensas a las lesiones. Por eso estos ejercicios son aptos para personas con problemas de musculación por que trabaja desde los músculos mas profundos hasta los músculos mas superficiales, de huesos y articulaciones por que activa los movimientos elementales de los huesos, ayuda la relajación mental y un mejor trabajo de la mente y por sobre todas las cosas al ver todo en orden nos vemos bien nosotros mismos.

Gracias a esta danza activamos el hipotálamo, que controla; la regulación de la correcta función vital, el comportamiento sexual, regulariza el comportamiento relacionado con la alimentación y las emociones y además mantiene la elasticidad de la piel.

Es una búsqueda mas profunda y refinada que el simple aprendizaje de innumerables pasos y coreografías como lo marcan las modas y las consignas publicitarias actuales, permitiendo así adquirir un estilo de vida propio, mejorando posturas, recuperando la autoestima perdida, la gracia y la agilidad.

Este trabajo corporal esta inspirado en el milenario arte oriental conocido como danza del vientre, que junto con la fuerza del Aeróbic son la herramienta perfecta que nos permite descubrir y desarrollar nuestra energía evolutiva, espiritual y sexual llamada Kundalini (simbolizada por la serpiente Pitón que duerme enrollada en el bajo vientre) tanto del hombre como de la mujer.

Al son de la música palpitante y con el fluir de las ondulaciones del vientre y de las caderas característico de esta danza, se despierta y comienza levemente a subir por la columna vertebral, con cada movimiento que hacemos al bailar al compás musical, la energía se desliza por la columna abriendo los canales internos, delicadamente, armonizando los cuerpos físico, etéricos, mental y emocional.

Con el Aeróbic se trabajan los movimientos más primitivos y elementales, la coordinación motora, el apoyo de los pies en la tierra, la fuerza de lo masculino (yang).

Con lo árabe trabajamos la sensualidad, espiritualidad, el desbloqueo pélvico, lo místico, la sutileza de lo femenino (ying). Con ambos lograremos la armonía que necesitamos para llevar una vida tranquila y sin sobresaltos.